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Se han desarrollado con total satisfacción por parte de la más de una docena de asistentes
Vícar, 13 de diciembre de 2019: Dentro de las actuaciones que lleva a cado el Centro Municipal de Información a la Mujer (CMIM) de Vícar, en su programa de Intervención Psicológica Grupal con mujeres que están pasando por situaciones de violencia de género, se han desarrollado recientemente varias sesiones de talleres de reflexión y autoestima, que han contado con la asistencia de más de una docena de mujeres. Estos talleres se han llevado a cabo en colaboración con el Instituto Andaluz de la Mujer como parte de la atención social integral.
En total han sido once sesiones que se han desarrollado con gran satisfacción por parte de las asistentes, quienes en sus valoraciones han expuesto la necesidad de seguir recibiendo estas terapias que consideran muy necesarias. También el alcalde de Vícar, Antonio Bonilla, ha destacado la importancia de estos talleres señalando que "existe una violencia previa que incluyen continuos ataques verbales y conductuales que recibe la víctima por parte del hombre y que en demasiadas ocasiones se disfrazan en tópicos típicos del amor romántico de sobra conocidos". Al respecto ha añadido que "muchas mujeres se ven imbuidas en un círculo vicioso donde teniendo el amor como coartada sufren en silencio situaciones muy alejadas de las que deberían ser vividas en relaciones sanas basadas en el amor verdadero y los buenos tratos".
La concejala de Mujer, María del Carmen García, añade que "en todo este circuito se entrelazan dependencias no solo emocionales, sino también económicas. Y el mal trato se ejerce en todas las áreas vitales de la relación, también en la sexual y más con los referentes actuales y la falta de educación sexual y emocional existente. Y más, cuando el perfil de un hombre agresor y machista está basado en el control y la sumisión de la mujer en todas las áreas vitales". De ahí la importancia que la intervención psicológica tiene para estas mujeres, como una herramienta de encuadre, empoderamiento y fortalecimiento de la autoestima y la capacidad para tomar decisiones desde una posición de mayor certeza, mayor seguridad, menor culpabilidad que la lleven a retomar y tener autoconciencia positiva, así como, a perder el miedo y romper con situaciones que no por normalizadas son adecuadas y sanas.
Entre las más de una docena de mujeres que han asistido a las sesiones de ambos grupos algunas cuentan con orden de alejamiento incluso y otras que se han traslado a Vícar después de la ruptura desde otras lugares. La mayoría con menores a cargo y con edades entre los 20 y los 65 años. Todas tienen su particular historia de vida y todas coinciden en que el miedo no puede seguir paralizando su vida, todas ellas son supervivientes de la violencia machista.
